Afección lentamente progresiva de etiología desconocida, caracterizada por deposición de tejido fibroso en el espacio retroperitoneal que comprime los uréteres, grandes vasos, conducto biliar, y otras estructuras. Cuando se asocia con un aneurisma de la aorta abdominal, puede llamarse periaortitis crónica o fibrosis perianeurismal inflamatoria.